Miren qué bien cuenta Santos Juliá alguna cosa que aquí ya habíamos insinuado, con menos datos y peor estilo.
Su artículo está en El País de hoy y se titula "Sobre la impunidad de los crímenes del franquismo". Pueden verlo aquí.
PD.- Si fuera interesante debatir algo de este artículo -seguro que sí-, convendría la discusión versara sobre el núcleo o sustancia del mismo, no sobre si el señor Juliá tiene un primo en Cieza.
Estimado autor. No soy muy partidario de las tesis del señor Santos Juliá, más bien al contrario. Pero sí estaría de acuerdo con él en que se juzgara a cualquier persona que haya tenido que ver con cualquier tipo de matanza o asesinato, sea del bando que sea. Que no se lo olvide al señor Juliá que anda por ahí suelto y dando clases de ética en la SER el señor Carrillo, que no seré yo quien diga que haya sido o no responsable de matanzas por el Madrid Republicano, pero que hay que mirar hacia los dos bandos.
ResponderEliminarSaludos
El argumento de la igualdad para los dos bandos resulta un tanto demagógico. Los vencedores aplicaron su justicia durante 40 años, ¿aún quieren más?
ResponderEliminarLos familiares no quieren otros juicios de Núremberg, quieren cerrar heridas, no encarcelar a nadie. Y por el momento la vía penal ha sido la única que ha movilizado a este país.
Pero que más da, colguemos a Carrillo.
Anónimo
ResponderEliminarDices que los vencedores aplicaron su justicia 40 años. Y los perdedores llevan otros 40 aplicándola. Con una diferencia ,que los vencedores no disponían de los medios de comunicación de ahora, en cuanto a calidad. Por tanto, si unos han estado 40 años y otros otros 40. Ahora se debe informar de todos y decir por qué acabó en una fosa cada uno de los muertos, que ese cuento de estar allí sólo por sus ideas, no se lo cree ni Vd ni su abogado.
Si quieren de verdad los perdedores cerrar heridas que reconozcan sus accines como asesinatos.
Bueno, en cuanto a lo de la justicia ejercida por los vencidos sólo hace falta aludir a los miles de muertos que siguen en las cunetas, a pesar de que muchos de los familiares lleven años queriendo exhumar sus cadáveres.
ResponderEliminarAhora yo me pregunto, ¿cuántos vencedores encontramos en las cunetas? no quiero aventurarme a dar una cifra. Ahora bien, no sólo a la hora de hacer justicia observo yo diferencias. Hablo de los crímenes cometidos por el bando republicano.
Creo que no haga falta recordar que se trató de un golpe de estado contra un régimen vigente en plena legalidad, y llevado a cabo por parte de una fracción del ejército. El General Emilio Mola recordaba que "quería derrotar a sus enemigos para someterlos a su voluntad, y aniquilarlos".
Por su parte, el General Queipo de Llano "facultaba a todos los ciudadanos a que, cuando se tropiecen a uno de esos sujetos (idiotas congéneres de Azaña), lo callen de un tiro". Como guinda, el General Francisco Franco, en una entrevista en julio del 36 expresaba que "ellos luchaban por España, resueltos a seguir adelante a cualquier precio"; el periodista le pregunta que si es consciente de que tendrá que matar a media España y el futuro "G"eneralisimo soltaba la siguiente perla: "He dicho que al precio que sea".
ResponderEliminarDada esta pequeña referencia histórica creo que pueden comenzar a apreciarse diferencias entre la intención de ambos bandos. No se trata de una simple guerra civil; se trataba de llevar a cabo un genocidio por motivos ideológicos. Nadie ha negado que, sobre todo en poblaciones de menor volumen, la venganza personal fuera la protagonista en múltiples ocasiones. Pero no hagamos de eso el motivo de la guerra, porque, de hecho, no fue así; miles de personas murieron por sus ideas, defendiéndolas, y defendiendo ante todo la libertad. También extranjeros, que no tenían nada que ver con las inquinas de este país. Sólo se pide que eso sea reconocido, esa es la justicia que se exige.
Se me quedan muchas cosas que quiero decir, pero ya me he extendido en exceso. Espero, le haga al menos reflexionar un poco.
Anónimo
ResponderEliminarEn estos momentos hay una interesante polémica al respecto entre Joaquín Leguina y creo que es Almudena Grandes en El País, disculpa que no te pueda dar fechas de hemeroteca, pero das con ello fijo. Me gusta la postura de Leguina y a ella me remito.
Has de comprender que toda revolución, es contra un régimen legal, como lo fue la de Castro contra Cuba, la de los bolcheviques contra el zar, la de los estados confederados contra los federados, etc...
Sigues sin dar respuesta a ¿por qué acabaron en una fosa los ejecutados? ¿por sus ideas políticas? la repuesta es no, fue por asesinos o colaboradores a asesinatos.
Mayores barbaridades que las dichas por Queipo o Franco las dijeron los republicanos de izquierdas no cito ninguna por no extenderme pero hay canciones de los rojos que son ya sintomáticas : "si los curas y tal supieran la paliza...", porque republicanos también los eran los de derechas, que aquí después de la guerra no se instauró una monarquía.
Dices que miles de personas incluso extranjeros muerieron por sus ideas, supogo que te refieras también a los del bando vencedor. Incluso los moros que mataron al 50% de los brigadistas internacionales.
Casi 40 años llevan los perdedores homenajeando a sus muertos con un despliegue informativo que no lo tuvo Franco jamás a su disposición.
Anonimo
ResponderEliminarEl gobierno de Franco fue reconocido como legal por Gran Bretaña desde casi el comienzo de la guerra por lo que eso del golpe contra régimen legal vigente duró poco porque rapidamente fueron legales los dos bandos según Derecho Internacional Público.
Un nuevo capítulo de nuestra serie "Positivismo sí, pero sólo a veces".
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