12 mayo, 2010

Tengo una pregunta para el economista de guardia

De Economía no entiendo, pero me vienen ocurrencias. Y digo yo, y lo consulto con quien sí sepa: si resulta que a los funcionarios nos bajan el sueldo y a los pensionistas les congelan las pensiones, unos y otros -y tantos que vean peladas las barbas de su vecino- empezarán a consumir menos, y al bajar el consumo no habrá salida para la producción y/o bajarán los precios y más empresas cerrarán o abaratarán costes y... subirá el paro. ¿O no?
Los griegos están en el diez por ciento de paro y tienen por ahí margen para su ajuste de gasto público. ¿Y nosotros?
Y también digo: aquello que gastamos en plan-E y así, para combatir el paro, hizo subir el déficit y ahora para bajar el déficit va a aumentar el paro -si es cierto lo del punto anterior-. O sea, ¿que hicimos el tonto? Y lo de subvencionar la compra de coches, por las mismas ¿va a hacer que ahora baje la venta de coches y también crezca el paro en la industria del automóvil?
Que alguien me diga pronto, por favor, que yerran mis ocurrencias. Porque ando en un ataque de pánico de padre y muy señor mío.
Me voy a la cama y a lo mejor decido no salir más.

13 comentarios:

  1. Su razonamiento es Keynesiano. Pero hay un monton de teorías sobre la economía y su funcionamiento y todas tienen algo en común, todas y cada una de ellas se ponen al servicio de alguna ideología. De todas maneras, esto pinta muy feo, y no vamos a saber donde ir porque Europa toda igual¿o no?

    ResponderEliminar
  2. Mi mujer y yo somos funcionarios. Solo puedo hablar de nuestro caso. Algo parecido a los temores que tú apuntas le he comentado hoy a ella. ¿No creará todo esto una sensación de crisis tremenda y la gente dejará de consumir?
    Ella me ha respondido que si. Que ella va a empezar a no gastar desde ya. No por lo que pasa hoy sino por lo que pueda venir.
    Con lo cual esto parece la pescadilla que se muerde la cola.
    Que dios nos pille confesaos!!

    Muy acertado el post anterior criticando a los que votaron a Zapatero de segundas.

    ResponderEliminar
  3. me temo que por ahí van los tiros, profesor.

    ZP ha pasado de ser una calumnia para España (con perdón), para serlo de Europa en su conjunto y parte del extranjero.

    ResponderEliminar
  4. Es que la medida del recorte salarial a los funcionarios no pretende crear empleo, como sí lo pretendía el Plan E (aunque ha sido un fracaso y creaba un empleo muy costoso para el contribuyente, de baja calidad y muy precario y dependiente del capricho del político del villorio de turno). Se supone que se pretende reducir el monstruoso déficit acendradamente alimentado por la Administración en los años pasados. Es algo así como el atracón a estudiar que se da el mal alumno la noche antes del examen (sé de lo que hablo por propia experiencia) por no haber estudiado con regularidad: se corre el riesgo de no subsanar lo que se ha dejado de hacer y de empeorar las cosas.

    ¿Y por qué ahora importa más reducir el déficit que combatir el desempleo si ambos son ciclópeos? Pues porque a corto plazo, el déficit influye más en que España pueda vender su deuda pública en los mercados de deuda soberana. Y si deja de venderse o se vende a un precio demasiado alto (como le ha pasado a Grecia) pues el Estado tendrá gravísimos problemas de financiación, entre otras cosas, para afrontar a corto plazo incluso las partidas de gastos corrientes, entre las que están precisamente, las nóminas mensuales de los más de 3 millones (¡!) de funcionarios.

    Así que desde un cierto punto de vista, esta medida casi podría considerarse como de protección del sueldo del funcionario, pero entiendo que si esto se lo digo a uno de ellos, me va a mandar a la mierda sin darme tiempo a explicar el razonamiento.

    El problema está en que pocos dudan de que lo que se ahorra en esto, se va a seguir gastando en polleces varias y en gigantescas urdimbres clientelares de recaudación de votos, como el PER, o manipulación de la opinión pública, como las docenas de medios de comunicación públicos al servicio de las taifas cainitas.

    Sobre cómo a un país le interesa tener una economía saneada para poder venderse (literalmente) como producto de inversión, me atreví a realizar una serie de entradas, seguramente con varios errores pese a mi buena voluntad. Por si a alguien le interesara, dejo el primero de los articulillos aquí:

    http://desde-el-laberinto.blogspot.com/2010/02/la-crisis-el-maniqueismo-y-la.html


    Saludos.

    ResponderEliminar
  5. Ya lo dije, o se solidarizan o les solidarizamos. Y han preferido solidarizarse.
    Bien por ZP en este aspecto. Se ha dado cuenta de que tenía que recortar a los del "sueldo fijo".
    Todos sabemos que un 80% del funcionariado español son enchufaos o recomendaos. Pues solo faltaría que por conocer a no se que concejal todos los meses a chupar, mientras los demás en época de crisis a la cola del paro.
    ¡venga ya!
    Ya veremos como los que más protestan por el recorte serán los autoproclamados socialdemócratas.
    A tomar por culo zampones. Y el que no sté agusto con el recorte que se vaya a buscarse los garbanzos fuera de la vaca ¿no son tan válidos?

    ResponderEliminar
  6. Entre los innumerables problemas de España hay uno que brilla con luz propia, pese a no tener luz alguna, o debido a ello.

    Si los funcionarios disponen de menor renta el consumo disminuye, lo que a su vez genera más desempleo.

    Este efecto negativo se supone compensado por la menor presión fiscal necesaria para hacer frente al pago de las, a partir de ahora, reducidas nóminas del sector público, o bien una disminución del déficit público con idéntico efecto sobre la presión fiscal. Se traslada simplemente la capacidad de gasto de unos a otros.

    La menor necesidad de financiación por parte del sector público libera recursos en beneficio del sector privado, lo que parece ser que tiene también efectos positivos sobre el empleo del sector privado.

    Los beneficios del Plan E irán por barrios, en aquellos casos que la inversión no se agote en sí misma (cambio del actual pavimento de baldosa de hormigón por marmol de Carrara con incrustaciones de lapislázuli) puede tener un efecto prolongado en el empleo o al menos derivar en una menor necesidad de gasto público (cambio del alumbrado convencional por lámparas de ultrabajo consumo).

    Lo de los coches, en la actual situación, creo que ha sido pan para hoy y hambre para mañana, con indudables efectos positivos y puntuales sobre las ventas domésticas y la correspondiente reducción de los abultados stocks que las marcas acumulaban, lo que junto con la devaluación del euro ha venido a salvar la delicada situación de los fabricantes de automóviles.

    ResponderEliminar
  7. ¿Los economistas de guardia? ¡Venga ya! Son los siervos y corifeos de quienes nos han pastoreado -con poquísimo esfuerzo, ¡qué bien han aprovechado nuestra ceguera codiciosa!- hasta este pantano de mierda en llamas, entre los cocodrilos.

    Desde ahora hay que pensar con la propia cabeza.

    Hay delante de nosotros una esperanza de supervivencia física, digo una. Pasa por ajustar nuestros consumos a lo que aguanta el planeta. En un año mejor que en cinco. (Nota: Los modelos basados en 'gastar' se follan sin remedio esta esperanza.)

    Hay delante de nosotros una esperanza de supervivencia social, digo una. Pasa por redistribuir, de veras, dentro y fuera de nuestras sociedades. En un año mejor que en tres. (Nota: Los modelos basados en 'ellos y nosotros' se follan sin remedio esta esperanza.)

    Bienvenidos a la realidad, amigos. Estoy empezando a pensar que sólo porque Zapatero nos diera este sustazo mayúsculo, valía la pena el sinsabor casi continuo de estas dos lechislaturas.

    Salud,


    [B, mi querido B: cuánta razón tenías, diciendo y repitiendo a quien te quisiera escuchar que "nunca has conocido a alguien tan tonto que no te pudiera enseñar algo" - hoy nos ha ocurrido a casi cuarenta millones, y de golpe y porrazo, con el títere "de izquierdas" que los poderes fácticos nos pusieran de maestro ciruela]

    ResponderEliminar
  8. No,no y no.
    Arremeter contra los votantes es, cuando menos,injusto.Cuando se vota (o no) es para que se haga lo mejor posible,la responsabilidad es del gobernante no del votante. ¡Hasta ahí podíamos llegar,oiga!
    Personalmente,me importa un bledo quien gobierne pero exijo resultados,rigor y transparencia.

    En un post anterior, ha puesto el dedo en la llaga referente a las comunidades autónomas.

    http://www.eae.es/es/noticias/cataluna-valencia-y-madrid-las-comunidades-autonomas-con-mayor-deuda-publica.html

    No he leído nada sobre bancos,cajas,partidos,sindicatos,
    prejubilaciones,creación de empleo,ayuda a las pymes...
    España, será el único país de Europa que toque las pensiones,tiene cojones la cosa.
    El estulto mayor del desgobierno asume su responsabilidad,dice. ¿Va a dimitir? Pues que deje de mentir, si asume su responsabilidad que dimita y la oposición también.

    Huy, ahora saldrán los sindicatos con una huelga general.Pues va a ir su padre, sin duda.

    ¡Qué hastío,oigan!

    Un cordial saludo.

    ResponderEliminar
  9. Que no, muy bien por ZP en lo del recorte a funcionarios y debe ser del 20% en los mil euristas y del 40% en los de más de 3000 euristas.
    Eso de haber entrado en la Administración por enchufín ya era hora que diera el cortocircuito.
    Funcionatas a las maduras tocan.
    No te fastidia hay parados a mansalva y estos quieren seguir con el vermut y el cafetín a las 11.
    Y hay que recortar también las pensiones de más de 2.000 euros, los abuelitos a cuidarlos los familiares como hacen los calés.

    ResponderEliminar
  10. He leido algunos de los enlaces que indican sus comentaristas. ¿Ratifican lo que yo le apunte en mi primer comentario? ¿verdad que si? La economía: sierva de la ideología. No espere que ningún economista de guardia le explique nada. Tendrá que investigar economía no sesgada por sus propios medios si quiere ser minimamente objetivo. Es lo que hay.

    ResponderEliminar
  11. No soy economistra, ni estoy de guardia, pero coincido con Carlos Díez en que las medidas anti-crisis del Gobierno de ZP solo tienen un objetivo: poder devolver y/o renegociar la ingente deuda pública que nos devora. En lo que queda de año, el Estado deberá refinanciar más de 70.000 millones de euros de deuda pública que vence, mientras que el desfase entre ingresos y gastos en 2010 alcanzará unos 100.000 millones de euros que, con las medidas adoptadas, y si son eficaces, se quedarán en unos 85.000 millones de euros; en total, más de 150.000 millones de euros, que tendrán que obtenerse emitiendo más deuda, y pagando por ella unos intereses más elevados. Así que los 15.000 millones de los recortes era el mínimo imprescindible para poder pagar al menos los intereses, sin que quebrara el sistema. Y esa es, precisamente, la razón por la que los mercados financieros y, sobre todo, nuestros acreedores (Alemania, Francia, USA), aplauden y alaban el recorte del gasto público decidido por el gobierno: al menos podrán cobrar los intereses de parte de lo que nos prestaron.

    Lo que sucede es que el recorte del déficit necesario para hacer frente a los intereses de la deuda no soluciona en absoluto los problemas de fondo de nuestra economía, como muy bien intuye G.A.: 1) una administración pública despilfarradora y, lo que es mucho peor, ineficiente, especialmente en las CCAA; 2) un sistema financiero ineficaz y sin los suficientes controles; 3) una productividad enormemente baja, debido, entre otras cosas, al bajo nivel de formación y a la escasa inversión en I+D y en infraestructuras; 4) una contracción del consumo privado –y del público, a tenor de la ralentización de las inversiones en infraestructuras anunciada por Pepiño Blanco-, y 5) un gobierno inepto, ignorante e incompetente. Problemas todos que, además, se agravarán irremediablemente.

    Con lo cual, los recortes en el gasto público que acaba de anunciar ZP (y la fuerte subida de impuestos que está preparando y que nos esquilmará aún más a partir del 2011) solo servirán, en el mejor de los casos, para hacer frente durante un año o dos a los intereses de la deuda pública, y para financiar el subsidio de desempleo, pero a costa de no hacer nada más, con lo que nuestra economía perderá aún más competitividad, no se reducirá apenas el paro y estaremos peor de lo que ahora estamos.

    Sin un cambio radical de política económica no hay salida, y ello resulta imposible con el actual gobierno.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  12. Sobran infraestructuras 'duras'.

    Faltan atrozmente infraestructuras 'blandas'.

    Pero ya se sabe, mucho más fácil licitar para amiguetes una T4, una circunvalación o una línea de AVE, que no reorganizar la educación, o la justicia. Y sobre todo queda mucha más manteca en el cazo.

    Salud,

    ResponderEliminar
  13. Interesante la aportación de Antón Lagunillas,¿cómo se haría ese cambio radical en la política económica? ¿de qué medidas estamos hablando?

    ResponderEliminar