A mí las reinas como más me gustan es satisfechas. A la mía se lo pregunto de vez en cuando: ¿estás satisfecha, reina? Unas veces será que sí y otras que depende. Creía yo que era un poco paleto andar con tales interrogatorios y hasta oí a alguna señora declarar no sé cuándo que es la cuestión más torpe que un varón puede plantear. Pero a la vista de la noticia que acabo de ver, se me quitan todos los miramientos y me voy a interesar más aún por la real satisfacción.
Pues dice la prensa que “Doña Sofía se muestra satisfecha por la maravillosa exposición de Antonio López”. ¿Qué habrá sentido la buena mujer de origen griego –¡vade retro! -? Debió de ser toda una sensación, pues el periodista lo pone en el titular. Como si la exposición del grandísimo pintor ganara algo por satisfacer reinas o como si la señora de nuestro Borbón fuera catedrática de Estética o experta esmerada en artes figurativas.
O como si fuera a decir, en ocasión tal, que se queda insatisfecha y como necesitada de dos exposiciones más. Pero así son las noticias o en esos mitos anda el periodismo patrio. Una dama reinante afirma lo que de todas todas tenía que afirmar y sabíamos que diría, porque para eso está, para no salirse del tiesto y no tener más satisfacciones que las debidas, y ya tenemos acontecimiento para una portada. Con todos los respetos -entiéndase- es como si viéramos en grandes letras impresas que la oveja baló o que zumbó una mosca. Y que lo hicieron a plena satisfacción. Pues a ver qué nos esperábamos.
A los tiburones. No a los del mar, pobres bestiecillas, sino a los de la historia.
ResponderEliminarSalud,