En
un gesto que está siendo la comidilla de todos los círculos políticos y
comentario de cada tertulia, el Rey acaba de sumarse a las críticas al sistema
monárquico y ha insinuado que vería con buenos ojos una radical reforma de la
Constitución para implantar la III República y, ya de paso, reorganizar
territorialmente el Estado, “con pleno respeto a las legítimas demandas
democráticas de los pueblos y las tierras de España”. Esas fueron sus palabras iniciales.
Fue
en una conversación informal con periodistas donde don Juan Carlos hizo tales
comentarios, llegando a aclarar que él asumió la corona más que nada por
espíritu de servicio y porque en aquel momento era cuestión de Estado dotar a
España de “un régimen de transición hacia formas más modernas de convivencia entre
los españoles y entre las españolas y entre los españoles y las españolas”. Se
le veía relajado durante esas manifestaciones y dio la impresión de que sus
palabras no eran espontáneas e improvisadas, sino que nacían de convicciones bien arraigadas.
Ni
que decir tiene que los periodistas presentes intentaron saber más sobre los
planes reales y las preferencias de nuestro monarca, pero no quiso añadir gran cosa. Sí les hizo saber que él podría abdicar para que, entre que la
Constitución se reforma y no, reine su hijo, don Felipe, y que, si todo sale
bien, él mismo, don Juan Carlos, podría plantearse el sacrificio de concurrir,
bajo consenso, como primer Presidente de la nueva República española, a fin de
"mantener en esos primeros años la convivencia entre los españoles, entre las
españolas y entre los españoles y las españolas”. “Sería como una nueva
Transición –agregó-, pero más breve, y luego el pueblo español tendría que
plantearse en libertad si desea que al frente de la Jefatura del Estado
republicana me suceda mi hijo o si España se vuelve a perder en enfrentamientos
fratricidas”.
Un
portavoz de Izquierda Unida ya ha declarado que en lo básico está de acuerdo
con el Rey, pero que rechaza las opiniones reales por carentes de legitimidad
democrática. En el PSOE se están haciendo frenéticas llamadas para ver qué se
dice que no parezca mal, y el PP, por boca de una de las chicas –siento no
recordar ahora cuál fue y voy con prisa ante lo fresco de esta primicia,
discúlpenme- ha manifestado que el país en todo momento debe mantenerse unido
en lo que quede y en torno a la monarquía o lo que sea.
Debería informar de estas primicias a la televisión española:
ResponderEliminarhttp://www.rtve.es/television/audiencia-abierta/
Qué mala pinta tiene todo en este país...
Yo vi esta entrada por la tarde y aun estoy flipando!! A ver, comentarios por favor. Que en todas las entrada habrá de promedio al menos cinco y en esta aun solo uno!!! que estoy por entrar en pánico viendo el mundo al revés!
ResponderEliminarOjiplática sigo un día después....
ResponderEliminarEh, eh, que era una broma mía, como otras de esta temporada. Pero creíble la historia, no me digan que no.
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