22 octubre, 2009

¿Somos corruptos?

(Publicado hoy en El Mundo de León)
Ya no hay día en los noticiarios sin una extensa sección de nuevos corruptos y pelotazos a tutiplén. Ayuntamientos, partidos, Administraciones en general, una hecatombe colectiva. Uno se pregunta si estamos cada día peor o si será que siempre hemos andado igual y ahora simplemente se nos ven más las vergüenzas porque nos hemos vuelto más descarados. También cabe pensar que el descrédito general de la política, el que los partidos y las candidaturas se llenen de trepas sin oficio a la búsqueda de fácil beneficio y el mal ejemplo constante de líderes y personajes públicos están llevando a la mayoría a la convicción de que esto es Jauja y a forrarse tocan.
Sea como sea, me parece que llueve sobre mojado y que el mayor problema está en que la nuestra es una sociedad de pillos que no acaba de asimilar que la ética pública no se sostiene más que sobre una ética personal bien estricta. No es que los políticos y empleados públicos estén hechos de una pasta peor, sino que puede que todo dependa de las oportunidades que a cada cual se le presenten para arrimar el ascua a su sardina. Así que quiero proponer un pequeño test para que el que quiera se examine en conciencia. Basta contestar en el fuero interno a las siguientes cuestiones con un sí o un no y luego sacar las conclusiones.
1. Si usted tuviera alguna influencia sobre los miembros de un tribunal de oposiciones, ¿hablaría con ellos para predisponerlos a favor de algún pariente o amigo suyo que concurra a las plazas en disputa?
2. Si usted integrara uno de esos tribunales, ¿atendería a los amigos que con ese fin lo llamaran e intentaría favorecer a sus protegidos?
3. Si de usted dependiera la concesión de un contrato administrativo, ¿buscaría la oferta más conveniente para el interés general o pensaría que si paga el erario público no importa que la empresa ganadora sea la mejor y más competente?
4. ¿Aceptaría usted regalos de quienes dependen de sus favores y trataría de apoyar a los que tengan con usted los detalles más amables o más caros?
5. ¿Le parece natural y justo que quien puede seleccionar para trabajos públicos prefiera a los de su partido, su sindicato, su grupo de amigos o su cama?
Ya me contarán los resultados.

4 comentarios:

Lagavulin dijo...

Supongo que a lo que aludes en esta entrada es a algo similar a lo que yo comenté aquí en su día. Veo la cuestión de la misma manera: los políticos están corruptos porque toda la sociedad es corrupta. Por otra parte por eso mismo toleramos tan tranquilamente ese estado de cosas, nos parecen muy humanas y muy cercanas.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Ya sé que está totalmente off topic, pero llevo varias horas frotándome los ojos después de leer (http://www.contencioso.es/?p=3007) que la ANECA está expidiendo certificados de obtención de la acreditación por silencio administrativo positivo. No sé si es una broma o una información errónea, pero tengo miedo, mucho miedo... ¿Alguien sabe algo?

Carmen dijo...

Noyno, si somos o no corruptos es irrelevante en este caso. El meollo de la cuestión es si son corruptos los politicos a quienes estamos pagando, votemos o no. Efectivamente, esta morena hace años que no acude a votar, pero me quejo lo que me da la gana porque para eso pago mis impuestos, oiga.
¿Funciona la justicia que deja en libertad al chorizo del Palau, o a los Albertos por prescipción y no facultativa precisamente?
¿Funciona el sistema educativo? ¿Y el sistema sanitario que cada día va de mal en peor?
Pues eso, exijo que funcione porque para eso se les paga, en cualquier trabajo estarían todos despedidos por incompetentes en el mejor de los casos, claro.
Si yo soy corrupta y me pillan no tengo duda alguna de que estaría en el talego una larga temporada. Esa es la diferencia, entre estos putos intocables y el resto.
Estoy de acuerdo en poner todos los medios posibles para evitar el fraude y su pronta detección, así como de que se efectúe una criba en todos los ámbitos. Ésto atufa, oiga.
¿Pero en qué trabajo se ponen los curritos sus sueldos, dietas, pensiones vitalicias, coches, viajes, vacaciones? ¿Por qué en ningún programa electoral se dan a conocer los privilegios a desterrar si alcanzan el poder?
Sería interesante que lo estudiaran los partidos pequeños como UPyD. O tal vez es tirar piedras sobre su tejado, claro.

Un cordial saludo.

un amigo dijo...

Me inclino a pensar que esencialmente somos corruptos, oh Juan Antonio. Un ejemplo emblemático: Eduardito (a) "estoyaquíparaforrarme" llegó a Ministro de Trabajo y a portavoz parlamentario de la mayoría, y el país no se paró, ni salió la gente a la calle.

El que calla, otorga, ¿no? Otrosí dicho, también el silencio ciudadano, el business as usual, tiene una responsabilidad moral, representa una adhesión al sistema.

En cuanto a la encuesta, detrás de ella está la clásica distinción moral entre lo abstracto y lo concreto. Plantea esas preguntas en abstracto, y el 90% de la gente te responderá cinco sonoros "nóes". Plantéalas en concreto, encarnando los posibles actores en "los otros", y los "noés" subirán al 140% (habrá gente que probará a votar dos o tres veces), y además sonarán harto escandalizados. Cambia a los actores, siempre en concreto, pero acercándolos a las lealtades y simpatías de los interrogados, y verás como florecen los "síes". Si no, ¿cómo se explica esta vaina?

La gran masa de votantes no emplea criterios éticos, ni siquiera prestacionales: emplea la adhesión tribal, que es a lo que nos han adoctrinado. Por desgracia, resulta relevante, demasiado relevante.

Salud,