Se pone caliente el blog. Gracias, se lo debo a los que leen y meten la pluma (o el sable) de vez en cuando. Me lo paso muy bien, pero me envicia, pardiez. Acabaré fumando Chesterfield, como el amigo Iurisprudent (por cierto, a ver qué tal eso de Mercantil).
Estoy en deuda de muchas respuestas, aclaraciones, etc. Se hace lo que se puede, pero no me da para más el tiempo ni el cuerpo. Así que voy a poner aquí, todo seguido, algunas notas que pueden valer como respuestas a críticas o preguntas y, también, otras reflexiones que no vienen a cuento, pero en fin.
- Se ha descolgado el nuevo Papa con una encíclica en la que explica que el refocile erótico con amor (heterosexual, eso sí) y, supongo, en el matrimonio, no es mala cosa. Que no hay que cortarse de darle gusto al gusto, tanto al propio como al de la contraparte legal, vaya. Aleluya. Habemus copulam. Pero gosando, que dirían los caribeños. Está muy bien, llega la liberación a los matrimonios católicos dados a la disciplina. A la disciplina eclesiástica, de la dogmática, digo. Ya veo a esas parejas opusianas acudir de la mano a la librería a buscar el manual del orgasmo perfecto o la serie sobre “cómo hacer que tu hombre te satisfaga” o “cómo hacer disfrutar a un hombre”. Bibliografía hay a esgaya, que diríamos en el pueblo.
Pero no es eso lo que me inquieta, sino que me pregunto cuándo le va a pasar al Vaticano lo que ya les ha ocurrido a las tabaqueras, que les lluevan reclamaciones por daño físico y moral. He conocido muchas señoras que, férreamente aconsejadas por su confesor y atentas al sermón dominical, se negaron siempre a permitir y permitirse cualquier placer carnal, ni siquiera en el matrimonio. Tengo alguna familiar que más de una vez salió llorando del confesionario por la bronca que recibió al reconocer que disfrutaba en la cama con su santo y se tomaban libertades. ¿Y ahora qué? Quién compensa a esa gente que se lo había creído y había obedecido? ¿Cómo pagar por tanta neurosis, tanto autodesprecio inducido, tanta desesperación, tanta privación? A ver quién es el primer abogado con un par de códigos que pide una compensación sustanciosa al Espíritu Santo (no quiero ser blasfemo, para nada, que conste) por haber iluminado defectuosamente a sus portavoces. O por andar cambiando de idea de hoy para mañana.
- Ayer contaban los periódicos que en Andalucía se ha aclarado un crimen de hace treinta años. Han descubierto el cadáver de una señora, entonces desaparecida, y ha averiguado la policía quién es el hombre que la mató. El hombre vive, pero no puede ser juzgado, pues el delito ha prescrito. Por cierto, ¿cuánto hace que terminó la dichosa Guerra Civil?
- Un artículo del proyecto de Estatuto de Cataluña, tal como al parecer ha quedado redactado (véase hoy El País, página 15), dice: “En las materias que el Estatuto atribuye a la Generalitat de forma compartida con el Estado, corresponde a la Generalitat...en el marco de las bases que fije el Estado...”. Bueno, pues parece que también ahí se habla del Estado igual que yo lo hacía anteayer, como Estado central y como Administración distinta de la de la Generalitat. Pero no dice Estado central ni Administración central, dice “Estado”.
- Me tomo muy en serio las consideraciones de dos queridos interlocutores sobre los problemas de la ley de partidos y la necesidad de tener en cuenta a los más de cien mil vascos que votan batasuno, si es que se quiere que la paz sea posible. De acuerdo, no digo que no y me quedo meditándolo seriamente. Pero, en aras de la consistencia teórica, me pregunto y les pregunto si mantendrían la misma postura si el caso fuera, por ejemplo, este otro, puramente hipotético: en la Comunidad Autónoma X hay un grupo nazi que ha matado (no te mosquees anónimo, ésos no son los tuyos) ya a mil personas, como manera de reforzar su reclamación de que se cambie el modelo territorial de la Constitución y se suprima o se aligere mucho el régimen autonómico, pues tienen una fuerte idea de España como nación una. Dicen que seguirán matando si no se les hacen concesiones de ese tipo. El nuevo Presidente del Gobierno, señor Y, del PP, está dispuesto a hacer concesiones, pues cree que es mejor la paz que la victoria. ¿Les aplicamos la misma consideración, o a ellos no porque son nazis? Es una pregunta genuina, no un ejercicio de dialéctica mala leche, que no tengo ahora, palabra.
Estoy en deuda de muchas respuestas, aclaraciones, etc. Se hace lo que se puede, pero no me da para más el tiempo ni el cuerpo. Así que voy a poner aquí, todo seguido, algunas notas que pueden valer como respuestas a críticas o preguntas y, también, otras reflexiones que no vienen a cuento, pero en fin.
- Se ha descolgado el nuevo Papa con una encíclica en la que explica que el refocile erótico con amor (heterosexual, eso sí) y, supongo, en el matrimonio, no es mala cosa. Que no hay que cortarse de darle gusto al gusto, tanto al propio como al de la contraparte legal, vaya. Aleluya. Habemus copulam. Pero gosando, que dirían los caribeños. Está muy bien, llega la liberación a los matrimonios católicos dados a la disciplina. A la disciplina eclesiástica, de la dogmática, digo. Ya veo a esas parejas opusianas acudir de la mano a la librería a buscar el manual del orgasmo perfecto o la serie sobre “cómo hacer que tu hombre te satisfaga” o “cómo hacer disfrutar a un hombre”. Bibliografía hay a esgaya, que diríamos en el pueblo.
Pero no es eso lo que me inquieta, sino que me pregunto cuándo le va a pasar al Vaticano lo que ya les ha ocurrido a las tabaqueras, que les lluevan reclamaciones por daño físico y moral. He conocido muchas señoras que, férreamente aconsejadas por su confesor y atentas al sermón dominical, se negaron siempre a permitir y permitirse cualquier placer carnal, ni siquiera en el matrimonio. Tengo alguna familiar que más de una vez salió llorando del confesionario por la bronca que recibió al reconocer que disfrutaba en la cama con su santo y se tomaban libertades. ¿Y ahora qué? Quién compensa a esa gente que se lo había creído y había obedecido? ¿Cómo pagar por tanta neurosis, tanto autodesprecio inducido, tanta desesperación, tanta privación? A ver quién es el primer abogado con un par de códigos que pide una compensación sustanciosa al Espíritu Santo (no quiero ser blasfemo, para nada, que conste) por haber iluminado defectuosamente a sus portavoces. O por andar cambiando de idea de hoy para mañana.
- Ayer contaban los periódicos que en Andalucía se ha aclarado un crimen de hace treinta años. Han descubierto el cadáver de una señora, entonces desaparecida, y ha averiguado la policía quién es el hombre que la mató. El hombre vive, pero no puede ser juzgado, pues el delito ha prescrito. Por cierto, ¿cuánto hace que terminó la dichosa Guerra Civil?
- Un artículo del proyecto de Estatuto de Cataluña, tal como al parecer ha quedado redactado (véase hoy El País, página 15), dice: “En las materias que el Estatuto atribuye a la Generalitat de forma compartida con el Estado, corresponde a la Generalitat...en el marco de las bases que fije el Estado...”. Bueno, pues parece que también ahí se habla del Estado igual que yo lo hacía anteayer, como Estado central y como Administración distinta de la de la Generalitat. Pero no dice Estado central ni Administración central, dice “Estado”.
- Me tomo muy en serio las consideraciones de dos queridos interlocutores sobre los problemas de la ley de partidos y la necesidad de tener en cuenta a los más de cien mil vascos que votan batasuno, si es que se quiere que la paz sea posible. De acuerdo, no digo que no y me quedo meditándolo seriamente. Pero, en aras de la consistencia teórica, me pregunto y les pregunto si mantendrían la misma postura si el caso fuera, por ejemplo, este otro, puramente hipotético: en la Comunidad Autónoma X hay un grupo nazi que ha matado (no te mosquees anónimo, ésos no son los tuyos) ya a mil personas, como manera de reforzar su reclamación de que se cambie el modelo territorial de la Constitución y se suprima o se aligere mucho el régimen autonómico, pues tienen una fuerte idea de España como nación una. Dicen que seguirán matando si no se les hacen concesiones de ese tipo. El nuevo Presidente del Gobierno, señor Y, del PP, está dispuesto a hacer concesiones, pues cree que es mejor la paz que la victoria. ¿Les aplicamos la misma consideración, o a ellos no porque son nazis? Es una pregunta genuina, no un ejercicio de dialéctica mala leche, que no tengo ahora, palabra.
Pero, amigos, me pregunto: si en Euzkadi hay que perdonar y pasar página, ¿por qué no pasamos de una vez todas la páginas y a todos los efectos? ¿Valen más los papeles que se llevaron los facinerosos franquistas hace casi setenta años que los hombres y mujeres que mató ETA hasta ayer mismo? ¿Tapamos las fechorías de los gudaris de mierda y destapamos simultáneamente las de los otros cabrones más antiguosb -muchísimos de los cuales eran catalanes, por cierto-? Extraña lógica veo en eso, salvo error u omisión por mi parte.
En cualquier caso, a mí no me parece mal que los papeles vuelvan a Cataluña. No es la decisión en sí lo que me desagrada, sino el que obedezca a precio y el cariz de las justificaciones que a veces se dan. Es un regalo y punto. Está bien así. O como devolverle al marido las bisuterías cuando la separación.
- De lo de google en China no sé qué pensar, no lo tengo claro. Por un lado, mejor que tengan un google censurado que ninguno. Por otro, ¿qué es mejor hacer con una dictadura? Si la aislamos se perpetúa. Si colaboramos, nos hacemos cómplices. Sólo de dos cosas colaterales estoy un poco convencido. Una, que google busca el negocio, y punto. Un mercado lleno de chinos, vaya chollo. Y, dos, China crece y el progreso económico trae la libertad. No es condición suficiente, pero parece condición necesaria.
- No le tengo, GPA, ninguna manía a Evo Morales. Ojalá acierte y sea capaz de librarse de todos los monstruos que dentro y fuera de su país están esperando para comérselo a mordidas. Ojalá resista y sepa crear riqueza y repartirla bien, comenzando por su gente. Ojalá, en suma, haga de Bolivia un país moderno, próspero y lleno de ciudadanos libres y con oportunidades. Sus amigos no me parecen los más recomendables, pero bueno, ya sé que hay poco de dónde escoger. Estuve el otro día un buen rato con un peruano que ha vivido un tiempo en Bolivia y conoce bien aquello. Él confía bastante en los asesores de Evo. Veremos.Yo sólo me pitorreo de los burguesitos que andan por aquí como locos esperando a que haya en las boutiques finas jerseys como el suyo, pero de marca Boss. Para ir guapo a la manifa, hija.
PD. Añadido el domingo 29: lo que yo desearía para Bolivia y todos los países de América Latina es algo como lo que cuenta hoy Vargas Llosa, en El País, de Chile. A lo mejor alguna tronante voz argentina, que sin duda no es la de algún burguesito porteño con lecturas lenitivas, vuelve a mandarme a las catacumbas por citar a Vargas Llosa y no a algún tonadillero comunitarista patagónico, pero lo asumo deportivamente.
- Un nuevo amigo desconocido (una de las cosas más emocionantes en esto del blog es que se pasa uno el día haciendo cábalas sobre quienes serán unos y otros de éstos que son todos amigos míos, que parece que me estiman y todo y que, todo lo más, asoman la patita por debajo de la puerta; pero mola así) me manda la dirección de su blog, donde se da caña a la manía punitiva de los gobiernos y al afán estigmatizador de los más débiles: inmigrantes, menores, etc. Es éste (haré lo mismo en el futuro con otros):
- No le tengo, GPA, ninguna manía a Evo Morales. Ojalá acierte y sea capaz de librarse de todos los monstruos que dentro y fuera de su país están esperando para comérselo a mordidas. Ojalá resista y sepa crear riqueza y repartirla bien, comenzando por su gente. Ojalá, en suma, haga de Bolivia un país moderno, próspero y lleno de ciudadanos libres y con oportunidades. Sus amigos no me parecen los más recomendables, pero bueno, ya sé que hay poco de dónde escoger. Estuve el otro día un buen rato con un peruano que ha vivido un tiempo en Bolivia y conoce bien aquello. Él confía bastante en los asesores de Evo. Veremos.Yo sólo me pitorreo de los burguesitos que andan por aquí como locos esperando a que haya en las boutiques finas jerseys como el suyo, pero de marca Boss. Para ir guapo a la manifa, hija.
PD. Añadido el domingo 29: lo que yo desearía para Bolivia y todos los países de América Latina es algo como lo que cuenta hoy Vargas Llosa, en El País, de Chile. A lo mejor alguna tronante voz argentina, que sin duda no es la de algún burguesito porteño con lecturas lenitivas, vuelve a mandarme a las catacumbas por citar a Vargas Llosa y no a algún tonadillero comunitarista patagónico, pero lo asumo deportivamente.
- Un nuevo amigo desconocido (una de las cosas más emocionantes en esto del blog es que se pasa uno el día haciendo cábalas sobre quienes serán unos y otros de éstos que son todos amigos míos, que parece que me estiman y todo y que, todo lo más, asoman la patita por debajo de la puerta; pero mola así) me manda la dirección de su blog, donde se da caña a la manía punitiva de los gobiernos y al afán estigmatizador de los más débiles: inmigrantes, menores, etc. Es éste (haré lo mismo en el futuro con otros):
http://blog.sindominio.net/blog/enchufe.
- Muy bueno y ajustado el editorial de El País alabando la probidad de los magistrados de la Audiencia Nacional que finalmente permitieron el traslado de los papeles a Cataluña. Nobleza obliga. Y sí, es verdad que El Mundo ha dado abundantes muestras de idéntico encanallamiento al criticar a los jueces que no se somenten a la disciplina de los amos. Pero "como te digo una co, te digo la o" (Sabina). El argumento tu quoque no sé si es razón bastante para desautorizar mis opiniones sobre la actitid de El País. Anticipé que TODOS los periódicos se mueven por el olor del billete y a las órdenes del que les da cadenas (o por resentimiento con el que no se las da) con las que atarnos las neuronas.
- Enhorabuena por la medalla, anónimo, es muy merecida. Sabe que me alegro de verdad. Y no me saque los colores, hombre.
- Se me acabó el tiempo hoy. Cuando pueda sigo. Por las conversaciones que dejo conversaciones a medias pido disculpas. Seguiremos hablando, sea como sea. Y gracias. En este cuadrilátero los golpes son todos limpios. Y agradables. ¿Será masoquismo?
- Muy bueno y ajustado el editorial de El País alabando la probidad de los magistrados de la Audiencia Nacional que finalmente permitieron el traslado de los papeles a Cataluña. Nobleza obliga. Y sí, es verdad que El Mundo ha dado abundantes muestras de idéntico encanallamiento al criticar a los jueces que no se somenten a la disciplina de los amos. Pero "como te digo una co, te digo la o" (Sabina). El argumento tu quoque no sé si es razón bastante para desautorizar mis opiniones sobre la actitid de El País. Anticipé que TODOS los periódicos se mueven por el olor del billete y a las órdenes del que les da cadenas (o por resentimiento con el que no se las da) con las que atarnos las neuronas.
- Enhorabuena por la medalla, anónimo, es muy merecida. Sabe que me alegro de verdad. Y no me saque los colores, hombre.
- Se me acabó el tiempo hoy. Cuando pueda sigo. Por las conversaciones que dejo conversaciones a medias pido disculpas. Seguiremos hablando, sea como sea. Y gracias. En este cuadrilátero los golpes son todos limpios. Y agradables. ¿Será masoquismo?
4 comentarios:
Estimado Juan Antonio,
perdona que me repita, pero con el relajo de neuronas del domingo por la tarde (puede que inducido por las copiosas libaciones que han acompañado la comida), he colgado esta respuesta allí donde no correspondía.
Decía allí, y digo de nuevo aquí, que es donde has lanzado tan retórica pregunta al mar de bits que nos envuelve, que tu curiosidad cronológica tiene respuesta no demasiado difícil, aunque dependa del punto de referencia; la Guerra Civil terminó hace 687,06 embarazos de cangura (*), si cuentas el 1 de Abril de 1939, o 587,47 embarazos de cangura, respectivamente, si nos referimos al 5 de marzo de 1948, fecha hasta la que el estado de guerra fue mantenido.
La unidad en que hagamos las cuentas es irrelevante: los crímenes de guerra y de lesa humanidad no prescriben.
Y la hoja de sevicias, huy perdón, de servicios, de Carnicerito del Pardo y de sus infames secuaces corresponde a dicha definición, de acuerdo con los estándares comúnmente aceptados.
Un abrazo,
(*) Embarazo del Macropus giganteus (canguro gris oriental): 36 días
Estimado Garciamado:
Bienhallado, le decía.
Nadie firma armisticios con un enemigo al que pueda vencer. Ya me he echado mil collejas encima diciendo esto en los sitios mucho menos oportunos.
Ahora me pongo en los zapatos de quienes no se pueden dar le lujo de pegar los gritos de rigor de la santa ira porque trabaja, entre otras cosas, garantizando vidas. A ellos la cesión penitenciaria (y yo creo que si les preguntásemos, dirían que también la de la marcha atrás de una ilegalización de puta coña) les ha parecido algo razonable en procesos como el Stormont o en contactos como los de Toulouse, Argel o Vevey (ucedé, pesoe y pepé: sólo falta el de la chunta). Y a medio mundo.
No puedo entender la posición de quien dice a la vez estas dos cosas:
a) “Quien niega la razonabilidad de las resignaciones de la Transición es un talibán que hubiese mandado todo al carajo intentando imponer su victoria sobre las limitaciones de los poderes postfranquistas”.
b) “Quien habla de la razonabilidad de las resignaciones para una disolución de ETA es un hijo de puta: hay que mandarlos a todos al carajo e imponer la legítima victoria”.
O sí soy capaz de entenderla. Dice Extremoduro: “o no lo entiendo, o lo entiendo demasiado”. Habrá que aclararse: o los que no entienden la necesidad de las componendas son unos talibanes / pijoprogres, o las componendas son poner el culo.
Claro: todo esto de los nazis, desde un punto de vista político. Pero usted habla de un gobierno que le hace concesiones a un grupo nazi, y me parece entender que no habla de las “generosidades” tras una hipotética disolución, sino que habla de lo que hablábamos el otro día: del acto de Batasuna en el BAC.
Me acuerdo de leer hace un huevo de años años, recién salidito del horno, un artículo suyo de ADF que hablaba del Derecho nazi; me llamó mucho la atención que la mayor crítica jurídica no fuese de contenidos, sino por la geplante Strukturlosigkeit y la arbitrariedad. ¡Eso al principio me irritó muchísimo! Pero me empapé aquello del valor intrínseco del Derecho en su exclusión de la arbitrariedad, y me lo creí bastante (luego yo he hecho mis pinitos sobre técnica interpretativa en el 3.Reich: por su culpa de usted).
O alguien prueba en juicio que esos dos grupos son el mismo, o leches. Lo contrario sería prescindir de la estructura que justifica la actuación estatal. Si la propuesta es: “hay que darles en tol’ bebes como sea, con la estructura que más duela en cada momento: si el juicio penal es lento, me invento una disolución gubernamental porque Copito me la va a pasar en el TC, o lo que sea”, la respuesta debería ser no.
(Libreme dios de llamar nazi a nadie: sólo estoy blandiendo un tabú para apoyar mi crítica y darle más cosa. Ahora que lo hace todo el mundo, no voy a ser menos).
;-D
Ya en concreto: lo de Grande-Melaraska es una medida cautelar del art. 129.2 en relación con el 1291.c) CP en un JUICIO PENAL, en relación con la investigación de aportaciones económicas que llegan a ETA desde (o pasando por) HB, y otras colaboraciones más materiales en relación con la red de Herriko-Tabernak. NO TIENE o NO DEBERÍA TENER NADA QUE VER CON LA LEY DE PARTIDOS (de hecho, es la segunda vez que suspende las actividades de una “sociedad, empresa, asociación o fundación” que supuestamente fue disuelta por la Ley de Partidos… aunque en sus autos luego lo líe). ¿Cuál es el problema? Qué hacer con quien desobedezca sibilinamente una medida del art. 129 CP. El 129.1.c impone la “suspensión de las actividades”. ¿Qué pasa si gente que no pertenece a la sociedad, asociación o fundación, que ya está disuelta, decide realizar actividades como las que realizaba la disuelta? Lío. Y no se nos ocurre más que amenazar con mandarlos a la sombra de 5 a 10 años por colaborar con banda armada. La c’est rien! :-) Sí señor: con un par de Marlaskas, y bien Grandes. Como si no existiese la STC 136/1999 (esa dijo que como darle un vídeo a la Junta electoral central no merecía una pena de 6-12 años, no podía ser colaboración con banda armada, que tenía esa pena). Que le gustará o no gustará, pero le vincula a su señoría de usted (art. 5 LOPJ).
Pero además… ¡si la cosa no es de constitucionalidad: es de puta legalidad! Me leo el inconstitucional art. 576.2, que me dice qué es colaboración con banda armada:
“- la información o vigilancia de personas, bienes o instalaciones;
- la construcción, el acondicionamiento, la cesión o la utilización de alojamientos o depósitos;
- la ocultación o traslado de personas vinculadas a las bandas armadas, organizaciones o grupos terroristas;
- la organización de prácticas de entrenamiento o la asistencia a ellas;
- y, en general, cualquier otra forma equivalente de cooperación, ayuda o mediación, económica o de otro género, con las actividades de las citadas bandas armadas, organizaciones o grupos terroristas”.
Releo la cláusula final, que es la inconstitucional por permitir penar en creación analógica de derecho penal. Y nada, oye. Asistir a un mítin no lo veo ni como hacer seguimientos, ni zulos, ni pasar mugas, ni entrenar asesinos, ni pagarles.
Aún tengo mucho Derecho que aprender para llegar a ser tan Grande como Marlaska. Y si no, pa qué: al carajo la estructura.
Sobre lo de "perdonar a la dictadura".
Supongo que los Estados sólo firman armisticios. No "perdonan", ni "pasan página": gestionan intereses y a veces ello obliga a postergar o suspender otros (como la ejecución de penas).
¿Y por qué habríamos de firmar armisticio con los criminales de la dictadura, si podemos ganar? Ahora sí que "enfrente no hay nadie". ¿O sí hay alguien? ¿O sí hay alguien dispuesto a sostener su causa, sólo por lo de que los enemigos de mis enemigos etc.?
Sobre lo del "Estado" y el "Estado central".
1. Mire, ya son más: ¡comparte Vd. terminología también con el redactor del Estatut!
2. El argumento no es convincente. A lo aristotélico, es una quaternio terminorum, que denomina "Estado" a dos cosas, por lo que traslada atributos de la una a la otra. Si cambio "Estado central" por "Estado autonómico", no he perdido Estado. Lo otro es o un lapsus o "contagio de prestigio".
Por cierto: llamar "desestatalizador" a este Estatut sí que es ir contracorriente... ¿No habíamos quedado en que era hiperregulador, antiliberal, totalitario, etc.?
Por último, ¿por qué ciertos medios dicen "Estatut" en catalán, pero "Generalidad" en traducción literal? Lo digo porque también salió "Generalidad" en el texto ese de "Plural y Pascual". Es como decir: "hoy el Ministro de la Extranjero Oficina, Juanillo Paja, ha visitado el número 10 de la calle Cuestabajo": mola.
Contestando a tu hipótesis, estimado Juan Antonio, sobre la Comunidad X: no marees la perdiz con nominalismos. Ni con historias incompletas.
1) Sobre los nominalismos. Lo "nazi" no es más que una manifestación específica de lo totalitario, y no merece ni mejor ni peor juicio. Si los "nazis" hicieron lo que hicieron, no fue porque fueran los "peores", sino porque tuvieron los medios y estuvieron organizados. Citando a Wiesel, la sorpresa no es tanto que haya habido una Gran Matanza, sino que sólo haya habido una.
Volviendo a nuestro aquí y ahora, ETA es claramente un grupo de vocación totalitaria, por recurrir a la violencia. Sus asesinos me merecen un juicio bajísimo, como cualquier otro asesino a sangre fría, instrumentalizador de la vida de otros para obtener sus fines.
Por lo tanto, los nominalismos de la hipótesis nos hacen perder tiempo, aparentando introducir un cambio donde nada cambia (aunque ni los de ETA son nazis, ni los nazis son de ETA) desde el punto de vista del juicio ético.
2. Sobre la historia incompleta. Decir que un grupo en la Comunidad X ha matado a 1000 personas para obtener la independencia es anular el contexto, y por lo tanto hacer imposible una lectura fiel de lo que describes. No sirve para nada. El contexto es, si me excusas que nos dejemos llevar por vicios profesoriles, tanto sincrónico -las 140.000 personas que votan HB, los simpatizantes, los vascos independentistas que no votan HB, la entera sociedad vasca, e incluso nosotros, que estamos aquí comentando- como diacrónico -la historia de malentendidos, mentiras y violencia, que arranca de mucho antes de la Guerra Civil pero que se enconó particularmente durante nuestra dictadura-. Si sacas el problema del contexto no se entiende ni jota.
Entonces, para responder a tu hipótesis, si reincluimos el problema que mencionas en el mismo contexto, por supuesto que la respuesta es igual e idéntica, como no podría ser. (Si en cambio seguimos sin contexto, la discusión se detiene, porque la hipótesis carece a mi juicio de interés).
El grupo me repugnaría, pero tendría que reconocer que la situación está tremendamente encenagada y que no existe algo como la "razón política". Existe la razon ética -los que han matado tienen culpa grave-, pero no lleva a ninguna parte, pragmáticamente hablando, ¿define "los que han matado" un grupo cerrado? ¿están todos los que son? ¿son todos los que están? ¿en el supuesto que lo definiera, se podrían deducir acciones necesarias de ello?
El otro día decía que hay que escoger entre la paz y la victoria. Me refiero no sólo a la victoria policial, sino también a la argumentativa. Ante un cúmulo de agravios y malentendidos -donde destacan los mil muertos, pero hay mucha más materia, y lo digo sin variar un ápice el juicio sobre los mil muertos, pero simplemente para recordar la complejidad de la cuestión- hay que buscar un método para encontrarse. Nadie en el gobierno de España lo ha buscado seriamente hasta el momento, por cuestiones varias: de cortedad, de estrategia política y, digámoslo también, porque la paz no ha sido una prioridad.
No pretendo imponerla a los otros, como ninguna otra prioridad personal mía. Pero lo que no estoy dispuesto a pasar, porque son ambigüedades que no hacen bien ni al que las dice ni al que las escucha, es que alguien me diga que quiere la paz, y luego no actúe en consecuencia. Juan Antonio: quítate la venda de los ojos. En el País Vasco, y en España, hay mucha gente que no quiere la paz. Un buen número de ellos, encapuchados; pero créeme, también muchos otros, en todos los partidos, en todas las instancias, hasta en las más altas del Estado.
Si quisiéramos colectivamente la paz, la pariríamos, créeme, con inmenso dolor y con renuncias importantes por ambas partes, pero la pariríamos.
Un saludo afectuoso, allá donde quiera que estés,
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