Cáspita y recórcholis, ojeo La Voz de Galicia y no doy crédito al titular: “Muere el cerdo de George Clooney”. Mis dos primeras sospechas se demuestran infundadas en cuanto con un clic accedo al cuerpo de la noticia. Había creído que se había muerto el famoso actor y que el redactor gallego la tenía tomada con él por alguna oscura razón, tal vez un problema de lindes en algún pueblo de la Ribeira Sacra. Pero no, Clooney sigue vivito y coleando, se supone, para deleite de sus muchas admiradoras, y el que sí estiró la pata fue su puerco, llamado Max y que, con sus 130 kilos, estaba realmente hecho un cerdo.
Mas, pensándolo bien, sí me parece que el periodista quería ajustarle las cuentas al guaperas de Hollywood por algún motivo que se nos escapa. Quién sabe qué disputarán. A lo mejor andan quitándose percebes o moviéndose los mojones por las noches. Pues vean el subtítulo con que aparece la luctuosa noticia: “el animal convivió con el actor a lo largo de 18 años”. Convivió. No hace falta ser Roland Barthes redivivo para darse cuenta de lo poco inocente que resulta la expresión. ¿Convivían? Sólo hubiera faltado, para hacer las delicias del periodismo galaico de manda carallo, que el animal hubiese sido hembra. Imagínense: “muere la cerda con la que George Clooney convivió 18 años”. Y todos a deshojar la lista de actrices famosas y modelos de postín y visa platino. Verdad es que el actor lleva también su parte de culpa, por andar declarando lo que declaró. Pues dice, si a Burela no llegó la noticia deformada por los vientos de estos días, que no se va a echar otro cerdo, pues “Max cubrió todas mis necesidades de cerdo”. Es lo que tiene la convivenica con un cerdo, que cansa. Que se lo digan a más de una.
Mas, pensándolo bien, sí me parece que el periodista quería ajustarle las cuentas al guaperas de Hollywood por algún motivo que se nos escapa. Quién sabe qué disputarán. A lo mejor andan quitándose percebes o moviéndose los mojones por las noches. Pues vean el subtítulo con que aparece la luctuosa noticia: “el animal convivió con el actor a lo largo de 18 años”. Convivió. No hace falta ser Roland Barthes redivivo para darse cuenta de lo poco inocente que resulta la expresión. ¿Convivían? Sólo hubiera faltado, para hacer las delicias del periodismo galaico de manda carallo, que el animal hubiese sido hembra. Imagínense: “muere la cerda con la que George Clooney convivió 18 años”. Y todos a deshojar la lista de actrices famosas y modelos de postín y visa platino. Verdad es que el actor lleva también su parte de culpa, por andar declarando lo que declaró. Pues dice, si a Burela no llegó la noticia deformada por los vientos de estos días, que no se va a echar otro cerdo, pues “Max cubrió todas mis necesidades de cerdo”. Es lo que tiene la convivenica con un cerdo, que cansa. Que se lo digan a más de una.
A propósito de cerdos: hace un rato escuché en la radio que el cardenal primado de Santiago de Chile, que ni sé si se llama Max ni cuánto pesa, visitó hoy a Pinochet -quien, dicho sea de paso, se está curando milagrosamente- y al salir rogó a los fieles que recen por su recuperación. Por la recuperación del otro cerdo, quería decir. ¿Y esos dos cuánto convivieron, 18 años o más? Hay que joderse.
3 comentarios:
Ilmo Sr catedrático, veo en su escrito, que es VI un hombre sin fe, ciego y con mucha furia atea.
Le diré, que gracias al general Pinochet, que cumplía órdenes de los USA en su famoso golpe militar fue para luchar contra el comunismo y los ateos y contra todos aquellos que no tenían alma ni corazón.
Su esfuerzo fue poner a Chile en lo más alto de todo el cono Sur, donde la riqueza fue tan inmensa y la abundancia en el trabajo que cualquier trabajador podía permitirse el lujo de recorrer todo el cono Sur de vacaciones e inclusive venir a Europa, cosa que ahora con este nuevo gobierno chileno , el pueblo está muerto de hambre, por no decirle a VI esfamiao total.
Es muy bonito y muy valiente hablar como VI habla, con ese sueldazo que tiene VI en la universidad y con el de su señora podrían VIs vivir bien y quitar mucha hambre a los harapientos chilenos que ha creado este gobierno.
Pensé que VI era un poco más juicioso por su título de catedrático y veo que se dedica a infamar a un glorioso militar como es el general César Augusto Pinochet, por lo tanto, cuando escriba VI, sea más consecuente con sus comentarios porque la verdad ese escrito es bastante calamitoso.
Y respecto que se mete VI con el cardenal primado de Santiago de Chile, le diré que es VI bastante ateo y que no cree VI en la unidad de la familia, no se los años que tiene VI ni su señora, que están recién casados, pero Dios, les va a mandar un trueno de fuego y quizá esa sea la maldición del reino de los cielos y le castigue para el resto de su vida sin el don más preciado que son los hijos.
Querido amigo y camarada Vox, creo y espero que Dios no castigue al profesor porque si no ¿a mí que tendría que mandarme? a tenor de que es justo.
Te entiendo porque siempre que se critica "un" exceso de "los nuestros" se nos vienen enseguida a la cabeza "varios" de los que antes eran de izquierdas, ahora , adoradores del becerro del oro y la consiguiente indignación de pensar : joder, si estos que van de ser el oro molido de la ética y la moral las mangan así ¿cómo tienen cojones a criticar a los demás? ¿cómo se fijan en la paja del ojo ajeno teniendo ellos un poste de Iberdrola metido en el culo?
vox populi:
Dios siempre castiga a sus hijos, por ende, él [nuestro castigador] debe ser muy muchísimo malvado. ¿No cree?
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