19 mayo, 2011

Si te sientes demócrata, no los votes

Es como lo de esas mujeres que viven con un maltratador furibundo y malnacido y que no aciertan a irse de su vera. Se lo dicen mil veces a sí mismas, que lo abandonarán; pero en cuanto el sujeto les dice que las quiere mucho, se derriten otra vez, y cuando les jura él que va a cambiar y a regenerarse, lo creen con devoción y lo abrazan con mimo. Y vuelven ellos a pegarles a ellas y a abusar y acaban ellas sintiéndose culpables porque no los hacen felices o quizá no los comprenden o no tienen la paciencia suficiente para sopartar sus acometidas de macho acomplejado y miserable.

Pues, salvando las distancias que haya que salvar y valiendo la comparación en lo que valga, tengo para mí que lo de seguir votando al PP o al PSOE es algo así. Incapacidad para soltar amarras, para librarse de lastre, para pensar y actuar como sujetos libres y no como rebaño. Y miedo, mucho miedo. Que viene el otro (o que se queda este), que llegan (o siguen) los más malísimos si no sigo dando mi voto a los horribles estos.

Eso por no hablar de los que continúan votando así por la misma razón que no se divorcia el que se casó por la Iglesia y se lo cree. Está en su derecho cada cual de tener su creencia, por supuesto. Pero menudo plan. O de esos otros que viven la contienda política como forofos futboleros. Es que soy de tal o cual partido de toda la vida y yo con mi partido a muerte, hagan lo que hagan y pase lo que pase. Que gane mi equipo aunque sea el que peor juega y a base de comprar al árbitro. Da igual, son los míos y lo serán hasta que mi muerte nos separe.

Da pena la gente, dicho sea sin querer montárselo uno de soberbio ni superior ni nada. Pero da pena la gente. Con su toque de asquito. Votan para que les sigan pegando, para que prosiga el engaño, para que se vuelva eterna la humillación. Renuncian a la política y a la ciudadanía, porque los rebaños no entienden ni de polis ni de interés general ni de derechos, los rebaños quieren redil y ansían pastor y perros guardianes. Es una calamidad la gente. Unos diez millones de conciudadanos nuestros solamente. Casi nada.

Claro que hay que indignarse de una maldita vez y obrar en consecuencia. Si estuviera en España estos días, iría a alguna de esas concentraciones o manifestaciones. Me he emocionado hace un rato viendo las fotos de la Puerta del Sol que sacan los periódicos. Claro que sí. No es verdad que sea cosa de jóvenes, como insinúan los diarios, hay de todas las edades, aunque, bendita sea, hayan reaparecido los jóvenes en la sociedad y la política. Por supuesto que no son antisistema, salvo que el sistema sea esta podredumbre de la política oficial y los partidos mayoritarios, en cuyo caso me proclamo ahora mismo antisistemático radical. No es verdad que, como dice una birria de artículo de Fernando Garea que acabo de leer en algún blog de El País, se trate sobre todo de gentes de izquierda que, así, no hacen más que quitar votos al PSOE a base de tanto protestar en tan mal momento. Como si tuviera esta desgracia de PSOE zapateril algo que ver con cualquier idea presentable de izquierda política. Van a quitar votos a los dos; y a CiU, por cierto.

No es verdad que haya que hurgar en libros o teorías para explicarse por qué protestan esos miles, pues lo verdaderamente extraño es que casi nadie dijera ni pío hasta ahora. Ya era hora, maldición, ya era hora. Y, por si a algún enano aun le quedaran dudas, se está pidiendo a gritos democracia de verdad, de la buena, de la que está escrita en la propia Constitución. Se solicita que se haga realidad y se aplique la Constitución. Hace falta ser muy del PSOE o del PP o muy de UGT o CCOO para no entender y aplaudir a estos ciudadanos que no quieren suprimir los partidos ni los sindicatos, sino convertirlos en serios y decentes, presentables, útiles para quienes los votamos y los sostenemos.

Con estos partidos, estos sindicatos, estos altos tribunales y toda la trama de tejemanejes y corruptelas que nos rodea, poca esperanza nos ha de quedar. Pero si alguna hubiera, será a partir de movimientos sociales así, libres, independientes, limpios. Y de tomar la calle y plantarse y jurar en arameo y decir bien alto que queremos Estado de Derecho democrático y social. Nada menos. Con un par. Y con la Constitución.

Ya conté aquí por qué no podré votar el domingo. Hay muchas opciones razonables para las elecciones del veintidós: no votar, votar en blanco o votar a un partido pequeño y que fastidie a los dos grandes abusones sin seso. Yo votaría a uno pequeño, si pudiera y como siempre he hecho últimamente. Pero comprendo perfectamente toda preferencia, menos la de poner el granito de arena en las urnas para que PP y PSOE, que tanto montan y son perros de la misma camada, sigan acabando con la esperanza, la decencia y la democracia en este país nuestro (no de ellos). Ese voto, que es el voto de los forofos y de los miedicas, es voto útil de los inútiles. Un asco de voto. Con perdón y tal.

13 comentarios:

un amigo dijo...

Finalmente está ocurriendo.

Hagamos política, participemos en la política: pocos proyectos más nobles. En la de veras.

Salud,

Un amigo de siempre dijo...

Totalmente de acuerdo. Expuesto con claridad meridiana,como siempre.
Resulta reconfortante leer/oir este tipo de alegatos, un poco de aire fresco frente a la contaminación e intoxicación permanente. Muchas gracias y un fuerte abrazo.

fragrante dijo...

Me estoy aficionando mucho a este blog desde que lo descubrí hace unas semanas. Prosa encendida y ácida y análisis interesantes... aunque el símil del maltrato lo habría obviado. Saludos.

El Abuelo Cebolleta dijo...

Como siempre Sr. García Amado, CLARO, ALTO Y CASTELLANO.

Sólo añadiría, que en este mayo ¿florido?, como en el otro mayo de hace 43 años, sigue siendo válido, el lema de este último: "Seamos realistas, pidamos lo imposible".

Anónimo dijo...

Te ha quedado muy mono el panfletillo barato.... pero te recuerdo que muchos españoles (entre los que me encuentro) luchamos hace unos años para que hubiera democracia y ALTERNANCIA en el poder, sin 11-M ni 23-F y ahora que el partido que tu pones detras del PP en corrupcion tiene las encuentas en contra ...eah ...ya no me gusta esta democracia que ya no ganan los mios.... esta clarisimo a tus amigos del PSOE nunca les ha gustado eso de la ALTERNANCIA...¿verdad?.

I.S.M. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
J. Barragán dijo...

¡ Pues claro que sí ! Esperemos que no se politice al final y que esto sea el comienzo de una " re-transición " a la democracia ( si es que alguna vez la hubo ).

Lo más indignación me causa es el maldito silencio de los medios de "desinformación" españoles, cuando incluso diarios estadounidenses, franceses y alemanes están hablando de ello.

J. Barragán dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Lopera in the nest dijo...

Querido amigo, evidentemente sabes que te echarían de la "acampada de la Puerta del Sol" después de diez minutos de debate. Bueno, creo que te irías, ah!, y yo que hubiera ido contigo, me iría también. Son las cosas que pasan en España.

Juan Antonio García Amado dijo...

¿Que yo defiendo a Zapatero y su PSOE? Oigan, un respeto. Prefiero que me llamen cualquier cosa. Tengo este blog lleno de pestes contra el tontaina de Zapatero y ahora resulta que me he vuelto cómplice objetivo del zapaterismo electoral. Lo que me faltaba.
En fin, cosas veredes.
En cuanto a los "protestantes" habrá de todo, por supuesto. Pero es gracioso que, mientras a los partidos dominantes se les tolera absolutamente todo y esos millones de votantes pasan por alto corrupciones, mentiras, amaños, etc., cada vez que algún grupo nuevo surge,sea para protestar, para plantear alternativas o hasta papra crear un nuevo partido, se les reprocha que no sean más puros que la Virgen de Fátima y que sus intenciones no sean totalmente angelicales, y se abren expedientes de limpieza de sangre.
Ya vale con tanto maniqueísmo burdo y tanta ley del embudo. Lo peor que podría ocurrir con este movimiento -o lo que sea- es que salga tan malo como el PP o el PSOE. Así que el riesgo es mínimo. Probemos y esperemos. Frente a las sospechas respecto de los de la Puerta del Sol, las certezas sobre el bipartido: PP y PSOE son una peste, la misma peste; eso sí está ya bien demostrado.

Rogelio dijo...

Yo también estoy emociando y sólo espero que tras las elecciones municipales las concentraciones pacíficas vayan a más en toda España y que continúen hasta que la casta política no se comprometa a dar un giro radical al actual estado de cosas.

Que se enteren de una vez que estamos hasta la punta del neke, que no somos tan tontos como aparentamos, que la paciencia se acaba, que cuando nos pisan el pie con tanta saña podemos sacar las uñas.

Que se enteren que este traje nos ha quedado pequeño, que los efectos del eficaz cloroformo están finalizando y que tenemos todo el derecho a exigir un futuro digno para los nuestros, sin que los principales obstáculos de la vida sean los que les ponen los que se supone que están para lo contrario.

Deseo de corazón que esto sólo sea el pricipio de un cambio con mayúsculas, que es hora que esta "chica" tenga su puesta de largo pues ya pasa de los 35 años y al paso que va la burra se nos queda para vestir santos y desnudar ciudadanos.

Anónimo dijo...

Me considero democrata y voy a votar al Partido Popular porque esas personas que tu defiendes solo dicen ·PSOE Y PP LA MISMA MIERDA ES· cuando se avecina un reves electoral para la izquierda española (llevamos muchos años aguantando la mentira) el fundamento y la salud de la democracia se mide unicamente con la ALTERNANCIA EN EL PODER que es precisamente lo que hace temblar a nuestra izquierda fascista desde sus origenes.... solo te pido que cuando se demuestre que esta "movimiento teledirigido" es un ardid mas desestabilizador del PSOE tengas la decencia de pedir perdon a los verdaderos democratas.

un amigo dijo...

Esta tarde estuve una horita y media en una concentración cercana a mi casa. Buen ambiente - y mucho camino por hacer. Me quedó la sensación de que los chicos han embocado el camino adecuado, que es enormemente difícil -aun así, el menos difícil para ellos, probablemente para todos-, y que no hay solución ni continuista ni evolucionaria.

Eso sí, ¡qué gusto leer entre líneas miedo, miedo cerval, en la prensa servil, y en los faroles jactanciosos de los bufones cuyo mundo ha empezado a resquebrajarse!

Salud,