26 noviembre, 2008

Soplagaitas, mantenidos y trepas que se forran en las CCAA

La Nueva España, periódico asturiano, publica hoy la siguiente noticia:
“El jefe de la sección de Nóminas de la Administración regional envió ayer por error un correo electrónico interno que acabó en las pantallas de multitud de usuarios. Se supone que el mensaje iba dirigido a un único receptor, pero, llegó a muchas más direcciones. En el correo se desvela una relación con los nombres, DNI, grupo, nivel, complementos y retribuciones de los trabajadores eventuales de los gabinetes de las consejerías. En total, suponen un coste bruto de casi 2,5 millones de euros al año. Son 63 personas que perciben sus salarios como jefes de gabinete o jefes de prensa en la mayor parte de los casos. Los sueldos van desde los 21.132,39 euros brutos anuales, el menor (sólo hay seis por debajo de 30.000 euros) a los 53.812,07 euros que perciben dos jefes de gabinete. La mitad se mueve entre los 40.000 y los 49.000 euros. Como referencia, un director general del Principado, el alto cargo con retribución más baja, cobra de media 57.594 euros. La información, a tenor del texto con el que fue remitida, tenía como finalidad conocer la relación de personal eventual del Principado en un contexto en el que son previsibles cambios por el pacto con IU, que va a ocupar con su personal de confianza las áreas de Medio Rural y Bienestar Social. Una vez descubierto el fallo, los trabajadores del Principado estuvieron toda la tarde sin correo electrónico. La lista circuló de mano en mano y fue redistribuida en fotocopias. Se convirtió en la comidilla de la jornada e hizo que algunos empleados se sintieran agraviados. Aparte de los 63 eventuales, los departamentos de prensa y el gabinete de cada Consejería cuentan con funcionarios asignados”.
¡Carajo!, todos ganan más que un catedrático bien adornado de trienios. Debe de ser gente preparadísima y la mar de currante. O con una retaguardia (o vanguardia, no seamos injustos con el género) lubricada y juguetona, vaya usted a saber.
El periódico ha sido considerablemente discreto, pero internet se ha puesto a echar humo y a escupir nombres y algunos datos más. Por ejemplo, recibo un correo electrónico en el que se cuenta que:
Nos encontramos con la hermanísima y la primísima de la Consejera de Administraciones Públicas, Ana Rosa Migoya, a las cuales enchufó en su Gabinete hace ya varios años. Entre ambas se embolsan al año la nada despreciable cantidad de 82.000 euros. Además, se pueden encontrar conocidos personajes del sindicato afín. En esto se han convertido las Comunidades autónomas y, más en concreto, las del PSOE, en unos chiringos caciquiles donde se se llenan los bolsillos para sí, para los familiares y para los amigos”.
Ciertamente, cabe sospechar que la sangría y el descaro no serán menores en las autonomías gobernadas por peperos.
¿No deberíamos los ciudadanos conocer al dedillo esos datos de todas las comunidades autónomas? ¿Desde cuándo el Derecho ha de garantizar el secreto y la impunidad de los tiralevitas y estómagos (etc.) agradecidos que se forran a nuestra costa?
También El Comercio, periódico gijonés, dio la noticia, aclarando que los juristas del Principado se apresuran a explicar que es ilegal difundir esos datos enviados por error.
¡Puaj!
¡Abajo las autonomías de Alí Babá! ¡Estado centralista y transparente ya!
Casualmente, Manuel Ramírez publica hoy en la Tercera de ABC un artículo titulado "El despilfarro autonómico". Un párrafo del mismo:
"En plena crisis y sin rechistar ante ello, lo que, a título de ejemplo únicamente citamos, Administración local, administración comarcal (¿con qué sentido?), administración provincial (todo se crea pero nada se suprime, naturalmente), administración autonómica (¡infinita en su alcance!) y administración hasta ahora llamada nacional. Diecisiete parlamentos con lo que ello supone: diputados con sueldos y dietas, presidencias con lo que quieran, Gobiernos Autonómicos con Presidencia, Vice-Presidencia, Consejeros, Vice-Consejeros, Directores Generales, Secretarios Generales Técnicos, Oficiales, instalaciones y, sobre todo, pléyade de «asesores y expertos» bien pagados por hacer o por no hacer. Defensores del pueblo de ámbito regional. Subdelegaciones aquí o allá. Increíble cantidad de Consejos Consultivos con licencias en sus profesiones y buenos sueldos (¿cómo es posible que con tantos consejos luego se hagan las cosas tan mal?). Coches oficiales y escoltas sin límites. Y así en una cita sin fin".
Muy cierto todo. Pero se le olvidó al profesor zaragozano un detallito referido a la administración de la investigación y las universidades. Mañana, si el tiempo me alcanza, contaré algún caso que he visto con estos ojos pecadores no hace mucho.
Vamos entendiendo por qué no alcanzan los dineros para aplicar la Ley de Dependencia. Hay demasiados "dependientes" en y de los chiringuitos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Esos latrocinios no los soluciona un Estado centralista. Lo que hay que gritar es ¡transparencia! Que sean públicos todos los complementos en las Autonomías, Ayuntamientos y Universidades.

Lopera in the nest dijo...

El grito del Prof. García Amado ha sido:

¡Estado centralista y transparente ya!

Y yo me uno a él!

Hans dijo...

Ah, mi querido Don Manuel, qué bien sabe de lo que habla. Yo suscribo lo dicho por él y por el Dr. García Amado: centralismo desaforado y transparencia absoluta.
Exigencia de responsabilidad (civil o criminal, no política).
Resolución de TODOS los contratos con 'personal de confianza', con asesores, con escoltas (que los 'cargos' aprendan que quien algo quiere, algo le cuesta. Y si no que aprendan a ganarse la vida como todos) y chóferes (los políticos, en transporte público, clase turista).
Fiscalización de todos los gastos realizados por 'cargos' por un tribunal especial independiente e inamovible con derecho al comiso directo de los bienes y derechos de aquellos que hagan uso abusivo de los medios de pago puestos a su disposición.
Item más: el Cabaret Tontucia debe ser reconducido a tener sólo tantos miembros cuantos partidos con representación parlamentaria (ni uno más). Y que esos siete u ocho parlamentarios trabajen, y que voten cada uno de ellos con los escaños teóricos que le corresponden. Los contratos con terceros para el debido asesoramiento de los tontucabareteros, con luz y taquígrafos (transparencia). Si quieren listas cerradas, que las tengan, pero así. Cerradas con bola y cadena, de hecho.

Anónimo dijo...

Hace unos meses un queridísimo amigo estuvo destacado en Austria en una misión de seguridad relacionada con la Eurocopa.

Próxima a finalizar la Eurocopa unos compañeros de profesión austriacos le transmitieron que el Ministro del Interior de aquel pais quería saludar a los integrantes de la misión española y agradecer su contribución al éxito del evento en la materia de su competencia.

En Ministro se presentó en el aeropuerto conduciendo él su vehículo, posiblemente oficial, sin comparsa alguna, agradeció la participación española, charló unos minutos con ellos, hizo unas fotos con su camara y se fué por donde vino; supongo que por el otro carril.

Igualico, igualico que los de aquí.

¿ Que principios eran esos que mentaba la Constitucion ?, ¿ eficacia, eficiencia, coordinación .... ? hostia, que chiste más bueno.

Yo también animo a lo de las transparencias, de todo tipo.