17 octubre, 2007

Con naciones y a lo loco.

Procuraré no dar más lata con las guasas del llionés, leonés o como se llame esta lengua completamente desconocida que, sin embargo y al parecer, es seña de identidad de todo un pueblo, el pueblo leonés. El destino ya está escrito en los astros y es que sí. Igual que la función crea el órgano, el político crea la nación y lo mismo le pone un idioma que un pasado –histórico, naturalmente-, un poco de silicona o un liguero. Alguna vez habrán existido naciones de verdad y propiamente dichas, no digo que no, particularmente en islas o remotos valles donde los primos se apareaban con los primos –y con algunas primas- y la comunicación tenía lugar mayormente por señas. Pero desde que la humana promiscuidad provocó carnales ayuntamientos con los de otros pueblos y desde que el ardor guerrero llenó todo de invasiones y mestizajes, no hay más naciones que las soñadas y las que a sí mismos se ponen los políticos para asegurarse sillón y dietas. “¿Y tú qué vas a ser de mayor?”, le preguntan al chiquitín de la familia en el colegio inglés al que lo mandan sus papis para no parecer menesterosos habitantes de un barrio sin clase? “Yo inventor”, responde él con seguridad. “¿Y eso?”. “Pues para forrarme, viajar mucho y tener secretarias y chóferes”. “¿Y qué piensas inventar para eso? ¿Vacunas? ¿Aparatos? ¿Programas informáticos?”. “No, no, naciones. Es lo que más da”. Porque ya saben el verdadero lema de todo nacionalismo: NACIÓN ES RACIÓN.
No hay por qué cortarse, pues de la misma manera que se convirtió en líder indiscutible y Führer sagrado de los arios un alfeñique moreno, de ridículo bigote, mirada demente y gesto como de afeminado con almorrana latosa, aquí se lo puede montar cualquiera de portavoz de esencias nacionales que no conoció ni por el forro, más que nada porque las está componiendo él sobre la marcha. Más que con la historia o con la política propiamente dicha (¡ay, noble arte en decadencia!), lo del nacionalismo tiene que ver con la coctelería. Coges tres o cuatro ingredientes de nada, que si una lengua real o ficticia, que si una asamblea que hicieron aquí en la Edad Media cuatro herreros puteados por el señor local, que si un manifiesto firmado en el XIX por dos sacristanes y un barbero, que si un panfleto con faltas de ortografía que redactó durante la Primera República (porque también hubo una República Primera, ¿saben?) un amante despechado que se decía literato y era simple carnudo disléxico…, lo metes en un programa electoral, agitas bien a la población y ya puedes servirte sillón municipal, escaño autonómico y puesto de asesor para tres o cuatro amantes foránea/os que se ganan la nacionalidad por rozamiento.
Será como se quiera, pero, como iba diciendo, la suerte está echada. Esto ya no hay quien lo pare. En diez años, máximo, los nacionalistas leoneses tendrán la mayoría política en esta tierra, se impartirán clases universitarias en esa lengua deslenguada, serán primados sus inverosímiles conocedores para el acceso a los puestos de la Administración Pública, se les contarán a los escolares historias de mucho miedo sobre unos leoneses originarios que hubo aquí de toda la vida y a los que primero maltrataron los romanos, luego los visigodos, más tarde los árabes, después los reyes asturianos y españoles y ahora mismo todo el mundo que se niegue a reconocer que el latín en verdad proviene del llionés y no éste del laboratorio del doctor Bacterio.
Y, hablando más en serio aún, ¿saben cuál será el próximo paso en esta irresistible ascensión de Xuan Llionés? Pues bastará con que en unas próximas elecciones a rector de la Universidad un candidato cualquiera –posiblemente todos- prometa a los estudiantes leonesistas que habrá menú leonés en las cafeterías del campus, programas de las asignaturas en leonés y majaderías de ese calibre. Ganará y tendrá que cumplir lo prometido, con lo que de la Universidad harán su feudo unas juventudes ociosas y poco estudiosas que se dicen nacionalistas por no reconocerse simplemente desechables.
Ya bien engrasado el aparato propagandístico, se irán subiendo al carro imbéciles para pegar carteles y listillos para ocupar cargos. Es posible que alguno de los primeros tenga algún primo segundo de la montaña que sepa un par de palabras de llionés. Los segundos ni lo sabrán ni les importará, aunque siempre pueden tomar unas clases particulares cuando se haya conseguido hacer una Academia de la Lengua Leonesa que diga cómo hostias se habla eso que no habla nadie. Unos, los más bobos, para sentirse tan majetones como catalanes, vascos o gallegos, otros por convicción de que como no tengas nación ni te hacen carreteras decentes ni te quitan peajes, y otros porque ven la manera de vivir a costa de los anteriores y de la mayoría silenciosa y pasota, cuando queramos darnos cuenta medio León será nacionalista de toda la vida y el PSOE y el PP se pondrán a hacer concesiones como locos, con la esperanza de pillar un puñado de votos de ese manicomio; o simplemente para seguir ocupando asiento, que de ahí viene todo. Pues no olvidemos que el verdadero principio del nacionalismo leonés, como de cualquiera, está cuando alguno de sus avispados impulsores se hace con concejalía de cultura y empieza a tomarle el pelo a la gente de ese modo que hemos visto en los periódicos locales de ayer y hoy. Nunca el oficio de payaso resultó tan rentable como en estos tiempos. Ayer mismo salió algún otro en la tele.
Y uno no puede dejar de preguntarse: ¿por qué son tan redomadamente idiotas los partidos mayoritarios, PP y PSOE? ¿Por qué están dispuestos a absolutamente cualquier cosa con tal de seguir un ratito más agarrados a esa birria de poltronas? ¿Están dispuestos a hacer cualquier cosa que les pida quien pueda darles una alcaldía, aunque sea mentir, inventarse naciones, vender a su propio hermano o ponerse en pompa cada noche en esa calle por la que pasan despacio los coches a la busca de carne de saldo? Ya, ya, ya sé la respuesta: sí están dispuestos. Amén. Vale. Pues los va a votar su mamá, que era del mismo oficio; es decir, política y partidaria del diálogo con todos y de amplios consensos; o de pactos de progreso.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

quisiera hacerle algunas preguntas a garciaamado -ya le había hecho algunas incontestadas en el artículo de leguina que transcribió...- Usted cree que España es una nación? si es así, sus críticas a lo nacional, que son constantes, acerbas y, si me lo permite, machaconamente reiterativas, ¿son también aplicables a la nación española y al nacionalismo español? se lo pregunto porque no veo el mismo ánimo devastador en lo que respecta al españolismo. El internacionalismo es una postura muy respetable, pero, por cierto, en su misma dicción aparece de forma paradójica el reconocimiento de la existencia de la sustancia nacional (inter-naciones).

Anónimo dijo...

Desde que sigo los comentarios de garciamado me ha parecido entender que está en contra de cualquier nacionalismo, sea el que gira entorno a la nación española, como el que se construye alrededor de las naciones periféricas. De todos modos, no creo que el objeto de este comentario sea una crítica al nacionalismo como tal, sino a los vivos sacaperras aprovechados que se forran a costa de inventarse identidades nacionales donde únicamente hay personas que viven más o menos tranquilas y, desde luego, tienen otros problemas. Lo del leonés parece la última manifestación de esa estupidez.
A la pregunta que usted plantea -cree que España es una nación-, yo le contestaría que España es una nación porque existe la creencia consolidada de que lo es (aunque no sé cuánto tiempo más durará esa creencia). No existe la misma creencia consolidada repecto a León, pero está claro que a base de meter dinero en folklore, llionés y gastronomía, será cuestión de décadas. Yo creo que no es racional, ni justo, ni conveniente, ni está justificado, que el dinero público se utilice para construir creencias nacionales.
(Los jueguecitos de palabras con inter-nación son equivalentes a los jueguecitos de palabras con auto-determinación: jueguecitos de palabras)

Anónimo dijo...

Ilmo sr catedrático, le diré que el lliunés como VI dice, es una lengua inservible actualmente ya que no hay ningún catedrático ni ningún profesor ni de filosofía ni de letras ni filósofos ni teólogos que lo sepan hablar.
Es más en unas declaraciones ayer del alcalde Francisco Fernández, el cual tuve por cortesía tener que hablar con el porque no me quedó más remedio en la plaza del Ayuntamiento viejo, retractarse al respecto de imponer el lliunés en las escueles municipales. No va a haber un 50% de nacionalismo leonés como VI dice, ni el 50% de comunistas ni de partido popular ni del psoe, ya que si se juntan los votos de los partidos minoritarios y de la gente que se abstiene serían los que gobernaran esta ciudad por mayoría absoluta sin tener que recurrir a ninguna clase de nacionalismo en ningún lugar de España ya que esos separatismos, no lo son, son independentistas que se quieren desmembrar de lo que verdaderamente es la nación española, le diré que respecto al lliunés encabezado por el homosexual Abel Pardo, no sabe ni el mismo hablar lliunés, pero si sabe envenenar la sangre de los leoneses ya que ne la anterior legislatura no pudo presentarse a concejal por la UPL ya que le defenestró Jose Mª Rodriguez de Francisco por su nacionalismo radical al reunir en esta bella ciudad a los nacionalistas de Jarrai, de Esquerra republicana del BNG y a las del partido independentista canario, lo cual el sr de Francisco le preparó la marimorena y le castigó sin ir en las listas de la UPL en esa legislatura.
Yo que conozco a Pardo personalmente, le diré que es una persona muy inteligente y lo único que ha hecho ha sido joder el partido de la UPL con sus tonterías nacionalistas, fue tanta la convulsión que hubo por esa reunión con los cachorros de ETA y cía en esta ciudad que poco a poco fue minando este individuo dentro del partido que fue lo que le costó la salida a de Francisco del partido por culpa de este trepador.
Mire VI como está el nacionalismo leonés que le puedo decir de los contactos y conversaciones que ha tenido Dn Abel Pardo bajándose los pantalones lo mismo que Lázaro Bayón alcalde de Villaquilambre para que Jose Mª de Francisco vuelva a hacerse cargo del partido así que en León nunca llegaremos a hablar el lliunés sino el morse o bien por señas como los mudos y si no dígame VI qué receta me da para que yo y mis hijos podamos aprender el lliunés que VI comenta en el post porque en el Diario y en La Crónica de hoy, se ha prohibido en los colegios por el sr Alcalde que se de el lliunés por las presiones de los partidos de ámbito nacional retractándose de lo dicho en días anteriores.
Le diré, respecto a la universidad de León sobre si se darán clase de lliunés como VI dice , primero tendrán VI y sus colegas que aprender lliunés que no se habla ni en León, ni en el Bierzo ya que más bien se habla casi el gallego, así que no creo que VI llegue a ver que se de el caso de que la universidad de León se de el lliunés.
Lo que si pueden hacer VI moralmente es suspender esos botellones tan famosos que tanto perjudica a la juventud y tanto daño hace a la universidad fuera de nuestras fronteras. Moralmente tendrían que empezar dando ejemplo de moralidad para que los estudiantes/as que son borrachuzos y porreros sería sancionarles firmemente con una buena sanción o suspensión del curso porque se dan las circunstancias de que las universdidades hoy existentes en España huelen mucho a corrupción a podredumbre y a trepadores así que a ver si se reune el claustro y toman VIs medidas severísimas sobre esa lacra que empaña el buen nombre de la universiodad de León.

Anónimo dijo...

iLMO SR CATEDRÁTICO, fuí ayer a una conferencia del profesor Bermejo, que dijo la realidad de los hechos que están pasando en medio oriente ¿qué quiere VI que le cuente respecto a la conferencia? Estuvo muy fino en sus afirmaciones respecto a Palestina e Israel.
La verdad que la mayoría de los que estábamos allí presentes nos quedamos muy sorprendidos de ver tanto españolito y españolita con el pañuelo palestino defendiendo esa postura contra Israel cuando lo más lógico es que se los hubieran quitado para sonarse los mocos o bien para quitarse las lágrimas de los ojos porque es una vergüenza que el pueblo palestino tenga dos gobiernos y se maten entre ellos, la pena es que no terminan de matarse para terminar con esa barbarie y que los niños bombas como en Iraq.
Sería una forma de terminar con esos terroristas y no darles tanta publicidad como les están dando los medios de comunicación españoles e internacionales, por lo tanto, como VI comprenderá lo veo muy claro de que el pueblo de Israel se defienda del terror palestino cavando túneles para pasar armamento para combatir al pueblo de Israel cosa que ya poco a poco están dejando de hacerlo ya que se matan entre ellos porque es un pueblo botarate y sin conocimiento común de causa para que haya dos facciones hinchándose a tiros entre ellos Al Fatá y Hamás que dicen que son los legítimos. Así que tenemos que dejar que se maten entre ellos y que dejen a la comunidad internacional tranquila y de paso que Egipto igual que USA se metan el dedo en el culo y controlen sus fronteras y no se metan en casa de nadie que nadie les ha llamado. Porque esto no es una casualidad, ni viene por las tierras ni por las ocupaciones, todo esto viene por los petrodólares y el petroleo, así que la conferencia estuvo muy interesante.